Los autónomos conviven con el miedo a que en cualquier momento aparezca un inspector de Hacienda. Si eres autónomo tienes que saber cómo actuar ante una inspección.
En primer lugar, hay que tener en cuenta que el autónomo tiene una serie de obligaciones que debe cumplir si no quiere agravar el problema. Lo que pocos trabajadores saben es que también tienen una serie de derechos, y que están capacitados legalmente para llevarlos a cabo.
Cómo actuar ante una inspección de Hacienda
Antes de que la Inspección aparezca por sorpresa en el negocio, el autónomo debe ser consciente de una serie de aspectos a tener en cuenta.
El autónomo puede negar el paso al inspector
El inspector solo puede llevar a cabo la inspección si cuenta con una autorización escrita del delegado de Hacienda de la zona o domicilio fiscal.
Por supuesto, es deber, y no derecho, del autónomo solicitar esta autorización.
En segundo lugar, aunque el inspector cuente con esta autorización, solo puede entrar en las instalaciones con el permiso explícito del dueño o, en su defecto, de algún autorizado o apoderado.
En caso de que el autónomo niegue el paso al funcionario con una autorización, este procederá a solicitar una orden judicial.
Si esto ocurre, el inspector ya no necesitará el permiso del propietario para acceder al establecimiento.
El autónomo tiene derecho a representación legal
Antes de que el funcionario proceda a llevar a cabo la inspección, el autónomo tiene el derecho a solicitar la asistencia de su abogado o de su asesor legal.
Por otro lado, tanto el propietario como el representante legal tienen derecho a solicitar la acreditación del inspector.
El domicilio es inviolable
En muchas ocasiones, el autónomo desarrolla su actividad en su propio hogar. Ahora bien, en ningún caso, el funcionario puede acceder a este domicilio sin el consentimiento expreso del propietario.
La única opción para acceder al hogar es solicitar una orden judicial que así lo establezca, y el funcionario tendrá que especificar claramente los motivos que existen para que sea totalmente necesario acceder a un domicilio.
El autónomo tiene derecho a restringir el acceso a cierta información
Como punto de partida, el autónomo tiene derecho a exigir que la inspección se realice en horario comercial. De nuevo, la única opción que tiene el inspector para no acatar la norma es a través de una orden judicial que disponga lo contrario.
Por último, el autónomo se puede negar a permitir el acceso a cajas fuertes, cajones con llave o similares que puedan contener documentos de carácter confidencial que pueden afectar a la intimidad, al derecho a la inviolabilidad de la correspondencia o al derecho a no declarar contra sí mismo.
Como no podía ser de otra forma, el funcionario necesita una orden judicial para acceder a este tipo de información.